No hace mucho tiempo que
empezamos a utilizar la expresión de “estado
de bienestar”. Aunque para todos, creamos que hace mucho, lo cierto es que antes no la usábamos, solo existían las
de “vivir bien” o “vivir mal” (malvivir).
Sea como fuere, el concepto, no es el mismo, “estado de
bienestar” es una acción que corresponde a los gobiernos que deben tender al bienestar social, con derechos igualitarios
que ofrezcan protección a toda persona en situación de dificultad económica o
de violación de derechos. Corresponde, al Estado y a la forma de llevar a cabo sus políticas.
Por otro lado, vivir bien o mal, es personal, se trata
sencillamente de intentar en cada momento, vivir de la mejor manera posible, sin perder de vista nuestro nivel económico, no es algo que pueda generalizarse,
sino que corresponde a la singularidad de cada persona. Recordaremos aquí al
filósofo Ortega y Gasset, que fue
quien en 1914 acuñó en su libro Meditaciones
del Quijote, la ya famosa frase de “yo
soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella, no me salvo yo”.
Pues bien, cada persona hemos de
intentar eso, adecuarnos a nuestra o nuestras circunstancias y a partir de ellas, es cuando hemos de buscar la manera
de vivir, de la forma que más bienestar
nos produzca y sin esperar que nadie pueda vivirla como nosotros ni incluso
entenderlo, pues cada uno de nosotros tendremos nuestras propias circunstancias
y no la de otros, que tendrán también las suyas propias. BIENESTAR, es una bonita
palabra por lo que su concepto encierra, pero ¡la forma de alcanzar ese bienestar…!
P.D. ALGUIEN me hace llegar el siguiente comentario, que parece darle fin a mi post : cada uno hace lo que puede para lograrlo con más o menos éxito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario