Por cierto, ¿recordáis que en España, antes y en lugar de
“las terribles calabazas” de Halloween,
usábamos “las terribles sandías”?.
viernes, 30 de octubre de 2020
MACHACANDO.-
martes, 27 de octubre de 2020
DOLOROSA SITUACIÓN.-
lunes, 26 de octubre de 2020
VUELTA ATRÁS.-
jueves, 22 de octubre de 2020
CASTAÑAS.-
Con 22 puestos callejeros, Córdoba capital, empieza a recordar la tradición de saborear un cartuchito de castañas asadas. Esas castañas que con el frío, se convierten en pequeñas estufa de manos, recién apartadas de la típica olla roja con su culo taladrado y colocada sobre un infiernillo con ascuas atizadas con soplillo de esparto, se han asado con la única reconocida herida de una raja que la atraviesa en su medio cuerpo. Padres y madres con sus hijos o abuelos con sus nietos, compran y saborean ese manjar natural. Pero tras ese cartucho de castañas que hoy compramos, sin duda vienen los recuerdos de nuestra infancia, de aquella infancia en la que ataviados con nuestros abrigos y con nuestra bufanda y gorro de lana de borla alta junto a nuestras botas katiuskas para los días de lluvia, comprábamos castañas también acompañados de nuestros padres. Es un ciclo renovado, como todo en esta vida, cambian los castañeros y cambian los compradores, pero sin duda, permanece y permanecerá el recuerdo para las nuevas generaciones, al igual que en nosotros ha quedado. A ver si este año, ellas y sus recuerdos nos hacen olvidar la cruda realidad “CASTAÑASSSSS ASADASSSSSS”.
martes, 20 de octubre de 2020
AIRES DE CAMBIOS.-
Comienza esta semana con la llegada de una borrasca de esas que tienen nombre propio por lo
que de especial traen. Ésta en concreto viene cargada de lluvia y con una cantidad y velocidad de aire que a punto está de llegar a
convertirse en vendaval. De hecho, llamarse Bárbara, ya implica algo de lo superlativo de su poder. Pues bien,
con ella llegan los litros de agua necesarios para empezar a recuperarse los
pantanos de nuestro territorio y con ello se alejan las posibles restricciones
a los agricultores y al campo. Bárbara trae daño y vida, como las dos caras inseparables de una moneda. Ya las riadas han
empezado por la provincia de Huelva y algunas inundaciones dejan una huella
indeleble de su paso. Pero dije que comienzan aires de cambios y así es sin duda, cuando junto al incoloro, inodoro e insípido líquido, se le une la llegada del frío, se augura el final de un corto otoño que
apenas ha durado un mes, desde que comenzara el 21 del pasado septiembre y
aunque hasta el 21 de diciembre no acabará su ciclo, lo cierto es que cada vez
las estaciones del año parecen disfrutar saltándose los períodos estipulados. Así que lo más
normal es que el invierno se adelante y ese sea otro cambio de los
que acontecerán. Sea como sea, sí hay algo que cambiará, y ese algo es LA
HORA, cambiaremos en la madrugada del sábado al domingo y atrasaremos nuestros
relojes una hora, como si se estuviese empeñado en prolongar aún más esta etapa
tan nefasta de nuestra actualidad. Lo dicho: “Aires de cambio”.
domingo, 18 de octubre de 2020
TIEMPO DE MIGAS.-
Transcurrido ya más de la mitad del mes de octubre y cercana la fecha de Todos los Santos, el próximo primero de noviembre, se empiezan a poner de moda las tapas de migas en nuestros bares con la consumición de los sábados o los domingos, alternando con la de arroz en el fin de semana. Esto hace que las terrazas de los bares, por al menos un día, vean hecha realidad la ocupación de sus mesas. Es un plato no muy difícil de elaborar pero que necesita de unos buenos brazos para remover continuamente el contenido del perol. Se inician haciendo pequeños trozos con el pan que haya sobrado en días anteriores en nuestra cocina, (unos 100 gramos por comensal) aunque hoy también se venden ya preparados en las panaderías, y vertiendo sobre ellas un poco de agua con sal, para empaparlas y dejarlas reposar durante una hora aproximadamente. En una sartén amplia, con un poco de buen aceite de oliva virgen, como el que tenemos en cualquier población andaluza, añadiremos unos cuantos dientes de ajos, junto a los torreznos de tocino o de panceta sofriéndolos bien y apartando, luego el chorizo y por último los pimientos verdes. Una vez fritos los ingredientes y sobre el resto de aceite de la sartén, se vierten las “migas” de pan, que iremos removiendo con continuidad hasta que empiecen a dorar y queden a nuestro gusto. Es en este momento donde vendría bien un refuerzo que nos turnase para ello. Es costumbre comerlas recién apartadas del fuego, y teniendo a su lado una bandeja con los demás ingredientes, si no se les han añadido a la sartén unos minutos antes de apartarlas, y con rabanetas o granos de granada. También se las puede tomar con naranja o con uvas o con melón. Incluso hay quien les gusta ponerlas con un chorreón de café con leche o con chocolate por encima o con un huevo frito coronándolas, pero, sea como sean, es un motivo más para reunirse con familia o amigos en torno a ellas y disfrutar de todo un manjar propio de las fechas en las que estamos. Son muchas sus variantes esta es la llamada “migas de pastor”, así que ¡Buen provecho!
viernes, 16 de octubre de 2020
DE NUEVO.-
Una vez más me pongo a intentar expresar mis pensamientos tras unos días en lo que lo único que he tenido que hacer es, disfrutar de un regalo que la vida me da, de ese regalo que nunca piensas que podrás alcanzar pues no piensas en ello, de la palabra ABUELO y lo que conlleva, que aunque puede ir implícita en la de PADRE, no siempre llega a hacerse realidad. Sí, he estado ejerciendo de abuelo, viendo crecer a ritmo agigantado a ese nuevo miembro que ha venido a agrandar la familia, mi nieto que llena de satisfacción a todos los que hemos tenido la suerte de compartir con él algunos momentos deliciosos. Ver como la inocencia y el ansia por aprender aparece cada día con más fuerza y de cómo la falta de preocupación, puede hacer a un ser humano esbozar en su rostro la sonrisa infinita de la felicidad. Es la mejor etapa de la vida de una persona, sin duda, es el momento de máximo aprendizaje, momento en el que su desarrollo cognitivo alcanza su apogeo y todo lo que le rodea empieza a verse en su color y con la nitidez necesaria como para darle valor y nombre a las cosas. Su constante atención a los estímulos exteriores, cuando no está dormido, y los diferentes intentos de comunicación con sus progenitores hacen que esos momentos adquieran el adjetivo de mágicos. Y ahora, el abuelo, piensa en el porvenir que le espera a su nieto, habiendo venido a nacer en el momento álgido de la pandemia y ruega porque todo le sea favorable. Pero ya estoy de vuelta y revisando ese saco de fotografías digitales (es lo malo de esta era, que al no haber carretes que las dosifiquen, las fotos se convierten en casi infinitas) que he podido coleccionar, hay una que quisiera destacar, esta que a continuación dejo, por la carga de pensamientos que tras ella encuentro, es la que yo llamo “futuro” aunque también pudiera ser denominada “manos de la esperanza”.