“Obras son amores
y no buenas razones”. Así reza un refrán español, y a la vez es el título de una famosa comedia
del escritor de nuestro Siglo de Oro, d. Félix
Lope de Vega y Carpio.
La explicación a su significado es sencilla, podemos
traducirlo así, son los ejemplos, las
obras realizadas, las que hacen que una cuestión sea buena o mala y no las miles de razones que podemos buscar
para explicar una posible actuación, un
proyecto, una idea, pero que rara vez llega a verse plasmada en una
concreta realidad
Pero el post de hoy va de eso de cómo hacer realidad la
ayuda a las personas mayores, (que
suelen ser los que menores ingresos obtienen, pues viven de su pensión de
jubilación) no tengan trabas, y tampoco se
encuentren con dificultades excesivas a la hora de llevar su día a día, sin que
tengan que privarse de ciertos privilegios que le harán más llevadera esta “ola
de calor” que estamos atravesando o que sin atravesarla o tenerla, quieran
acudir a diario a darse un buen baño, un refrescón en aguas sanitariamente tratadas, en una buena y hermosa piscina dotada de suficiente espacio de zona verde (césped) y con sombrillas
de las de tipo playa.
Se trata en este caso, de una piscina de dimensiones
olímpicas de 50 metros de largo por 25
de ancho e inaugurada en el año 2002, sustituyendo a la anterior que había
en el mismo lugar. Junto a estas zonas de baño, también encontramos un
bar-restaurante de muy buena calidad-precio.
Pues bien, Obras son amores…, la entrada a todo este mundo de frescor y de ilusión por un día,
para las personas mayores son 4€, y para los niños 2€, (aunque la mejor opción,
es la adquisición de bonos de 10 baños, en los que el descuento es bastante
grande) pero sin duda alguna donde más se aprecia el esfuerzo, es en la entrada
de las personas mayores jubiladas, que
está al alcance de cualquier tipo de pensión que se cobre, no llega al Euro (0.70 €), y eso, sí es facilitar las cosas.
¡Bravo
por el Ayto. de Fernán Núñez.!
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