sábado, 26 de junio de 2021

PROBLEMÁTICOS MICROCHIPS.-

Recuerdan el refrán de “si éramos pocos, parió la abuela”? Y se preguntarán que a qué viene eso ahora, pues voy a intentar explicarlo.
Después de este último año de malas consecuencias a nivel mundial (por la pandemia) y ahora que parece estar empezando a verse la posibilidad de superarla, ahora que se van a invertir miles de millones en intentar sacar a flote de nuevo la economía mundial, ahora que parece que las fábricas pueden volver a ser operativas al 100% y que los millones de trabajadores en situación de ERTE pueden volver a sus puestos de trabajo, sin más miedos pues la vacunación ha ido a un ritmo inusualmente rápido, ahora, insisto, que todo parece ir viento en popa, surge el gran problema que a todos nos mantendrá en expectativa hasta parece ser que más allá del 2022. 
El problema ahora se llama: “semiconductores” (cuerpos que a veces dejan pasar la electricidad y otras la aíslan) siendo los compuestos por el silicio o el germanio los más usados; (cadmio, aluminio, fósforo, azufre… y otros muchos más, también lo son). Pues bien, la escasez de estos semiconductores en una sociedad tan industrializada y digitalizada como la nuestra, en la que casi todos los electrodomésticos, los ordenadores, los móviles…etc llevan integrados chips fabricados con semiconductores, ya está poniendo en jaque a empresas e industrias importantísimas, desde las que se dedican a los bienes de consumo como las automovilísticas en las que cada día se montan más microchips integrados e inteligentes.
¿Y por qué faltan semiconductores para hacer los chips? Pues no es fácil la respuesta, pero como todas las cosas que se encuentran en manos de unos pocos, son estos pocos los que marcan el ritmo;  y en esta especialidad, es una compañía de Taiwán la que lidera el ranking con diferencia (la TSMC = Taiwan Semiconductor Manufacturing Company) seguida de Samsung.
La demanda de equipos informáticos durante la pandemia ha sido espectacular y la compra de vehículos también va en aumento y cuando la demanda crece la oferta es más escasa.
Un consejo si lo admiten, si tenemos en mente la compra de algún bien de consumo, o de un coche, hagamos la compra antes de que conseguirlos lleve una espera de meses y quizás a  un precio mucho mayor.

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