Bueno, esto de peste, hemos de entenderlo como la
acepción de cosa muy molesta, de poca calidad, muy abundante, que puede ocasionar daño grave y ruina
escandalosa. Por eso se puede acompañar de los adjetivos: terrorífica,
dañina e injusta.
No es referido a la enfermedad de la que hemos
oído hablar y que tantos muertos dejó a su paso.
Asistimos a una subida de precios abundante y muy
nefasta para los ya paupérrimos bolsillos de muchos ciudadanos causada por la pandemia del covid y las dificultades para salir adelante en sus puestos de
trabajo o empresas..
Son productos de primera necesidad, mi anterior post,
hacía referencia a la subida de la electricidad, pero no es solo esa la que
estamos soportando.
LA GASOLINA, o Gasoil, que está alcanzando unos precios
casi imposibles de pagar, llegando ya hasta los 1.35€/l y parece ser que seguirá subiendo, en
vísperas de unas posibles multitudinarias vacaciones, lo que hará que todos nos
rasquemos un poco más el bolsillo para seguir pagando impuestos y acortando la
posible estancia de los días de relax.
También ha subido últimamente, la bombona de butano, el
trasporte por carretera, la factura del agua…y podíamos seguir enumerando unos
pocos de productos más, pero no es necesario pues cualquiera los tiene frescos
y presentes.
Lo que sí es verdad es que quizás sea la subida de la
electricidad la más dolorosa y dañina para todos, pues, sigue en ese ascenso de
precio vertiginoso que hace que incluso nos planteemos dejar de poner en funcionamiento
el Aire Acondicionado en nuestros pisos… o quizás debería llamarlos SAUNAS.
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