Hoy hemos estado con nuestros abuelos, bueno, no con todos, solo con dos, pero es como si fueran los abuelos de todas y todos mis alumnos.
MOTIVO, ninguno en especial, solo OIRLOS. Oírlos, sí.
Porque a ellos no les molesta contarnos cosas de sus años jóvenes y a nosotros porque nos encanta escucharlos.
Una abuela y un abuelo, respectivamente, nos han contado algunas “cosillas” y nos han dejado con la miel en los labios y deseosos de que nos cuenten más.
Y es que los que hoy nos pueden ayudar a salir de la crisis tan tremenda que tenemos, no solo económica sino de valores sociales y morales, son ellos sin duda.
Escuchémoslos, tenemos mucho que aprender de lo que son sueños, aventuras, sacrificio y afán de superación.
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